De hojas secas y, arrepentimiento

Mañana de fin de otoño en Córdoba...El tiempo cambia de repente trayendo un fuerte viento,  que me obliga a ir a las ventanas que se golpean.
Veo las ráfagas arrancando de la parra las hojas secas, y reflexiono sobre como obra Dios en nuestras vidas.
"Por tanto, dejando ya los rudimentos  de la doctrina de Cristo, vamos adelante a la perfección, no echando otra vez el fundamento del arrepentimiento de obras muertas" Hebreos 6.1
El arrepentimiento de obras muertas se lo conoce como la doctrina fundamental (o fundamento) numero 1.
Arrepentimiento significa en su original metanoeo, o cambio total de dirección (venía para el sur, ahora me decido a ir al norte).

El Señor nos enseña en Su Palabra que la fe sin arrepentimiento, no es completa ni válida.
No solo debo creer, debo cambiar hacia lo que he creido. Hay una diferencia que implica una toma de decisiones al respecto.
No podemos crecer, si no nos arrepentimos.
Pedir perdón sin cambiar y volver a lo mismo una y otra vez nos conduce a circulos enfermos .
El arrepentimiento nos da la fuerza para tomar las decisiones que impactarán en nuestro futuro.Ahora ¿de que tenemos que arrepentirnos? "de obras muertas" nos enseña el Señor. De cosas viejas que debemos dejar atrás si queremos experimentar el "nuevo nacimiento" un "nuevo hombre".
Las obras muertas son el pecado, el dolor, las fallas, el seguir al mundo y sus afanes no a Dios, son conductas equivocadas, es un modo de vida fuera de las reglas de Dios.

Y no hay mejor ilustración que mirar como la naturaleza obra en su ciclo . Cuando las hojas  de una planta han cumplido su misión, y el verano se muda en el otoño, la hoja muere. Y son las  tormentas  y los fuertes vientos del otoño, los encargados  de arrancarlas, dejando un lugar limpio, desnudo, donde en el renacer de la primavera, crecerá el nuevo brote, y hojas nuevas y fuertes vendrán.
Este proceso no puede cumplirse si las tormentas no arrancan las hojas muertas.

Los desiertos y tormentas de nuestra vida, son los encargados de arrancar las "obras muertas" esas hojas secas que impiden el desarrollo sano de los nuevos tiempos.
Así que cuando la lluvia te impida ver el camino, y sientas angustia.
O  venga  la tormenta de arena y de repente seas  introducido al desierto sin aviso y no veas nada mas que calientes arenas en el horizonte.
O sientas  el cimbronazo del viento y el cambio que eumpuja situaciones  te  estremezca la piel .
Mira al cielo, y alégrate, porque tu oportunidad de cambiar y crecer ha llegado.

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