Resolución de Conflictos: Saliendo de la zona de comodidad.

El problema aparece, y lo que era antes una pequeña nube en el horizonte, de repente ha ocupado todo el cielo con una gris cubierta.
Quiero dejarte dos ideas claras.
1- NO apliques la anestesia, no guardes el conflicto ni lo minimizes, las nubes no se irán porque miremos el cielo con rabia.
2-NO te detengas. No te recluyas en una zona cómoda.

Cuando el impacto del rayo, de la palabra dura, o la herida aparecen, nos retraemos. Y de tanto retraernos, nos recluimos en lugares que nos son más amables.

Cuando estamos lastimados, o en conflicto severo está bien hacer un alto para reflexionar, o para permtir que Dios nos restaure y sane.
Pero luego, la vida es movimiento, cambio, riesgo, desafio.

El agua estancada muere. Seamos ríos que corren, alimentan, y siguen el eterno ciclo de la vida. Tal vez desaparezcamos en una nube, pero mas tarde volveremos como gotas.
Hay ríos pequeños, enormes,   los hay mansos y  bravos.Elige a lo que fuiste llamado. 
Atrévete a romper los diques que te contienen, y correr.

Hacer un alto para reveer adonde vamos no es lo mismo que acomodarse en el barro del costado y decidir que aunque el lugar es sórdido, al menos estamos a salvo de nuevos riesgos.
Eso es la zona de comodidad, la zona donde te estancas, donde te recluyes con tu computadora, el televisor, con un libro, con nadie, a "salvo" de los riesgos de nuevas relaciones.

La vida es relaciones, se trata de relaciones. y para relacionarse hay que arriesgarse. Para amar, hay que tomar decisiones de cambio.
"El amor "ES" sufrido dice 1º de Corintios, si, lo más probable es que sufras al amar, pero si no te arriesgas, nunca sentirás la dulce sensación de un abrazo.

Ayer escuchaba en la televisión un testimonio de una joven en proceso de recuperación de un problema físico que la llevó a autoexcluirse de la gente. Con la vista baja confesó que no respondía  al pedido de abrazos de sus padres, porque le molestaban.
Yo la entendí perfectamente, por un tiempo, tampoco quise ser abrazada. Cuando uno abraza se abre a otro, y el rechazo puede doler.

No es que rechazamos el abrazo, rechazamos el riesgo.

Así que las normas sencillas que hoy dejamos  como parte de la resolución de un conflicto son:
-No retraerse
-No a la auto-reclusión
-Abrirse a amar
-Pedir ayuda!
-Hablar de lo que nos pasa
-Salir de toda zona de comodidad.

Dios hizo reglas para que vivamos una vida abundante, el rechazo de Dios a esas reglas nos ha hecho ver tan solo la realidad de un mundo muy complicado, lleno de dolor e injusticias. Asegúrate hoy de tener a Jesus en tu corazón, y de estudiar cada día sus leyes perfectas que guiarán tu día como la brújula del navegante.

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