"Love comes softly" es la primera de ocho películas que componen la zaga "El amor toma tiempo". Debo confesar que a pesar de la recomendación que recibí de alguien confiable, la abordé con bastante escepticismo pensando encontrarme ante una novela romántica más.
Lejos de eso la serie de Michael Landon Jr. sobre los libros de Janette Oke tiene mucho que enseñar sobre los valores básicos del amor, como el esfuerzo y devoción personal que se necesitan para afianzarlo. Las principales relaciones interpersonales también son profundamente tratadas en esta serie.
Nos encontramos al comienzo con un drama tan doloroso como absurdo, y se diría que la vida termina ante el desastre..., pero "los viajes que terminan solo muestran los que están por comenzar". Los inviernos de la vida llevan escondida la primavera y en el fondo de todo pozo, puede vislumbrarse la esperanza.
Cuando la crisis aparece a veces no se puede perder el tiempo llorando por lo que se ha perdido, la vida en esos momentos es "sobre necesidades urgentes", definiciones inmediatas para lograr sobrevivir. La vida puede ser extremadamente dura cuando se pierde un ser amado pero las pérdidas compartidas traen necesidades cubiertas. Aún sintiendo que se ha perdido todo se puede cuidar de otros y encontrar en ello un motivo para seguir y aún la sanidad personal.
De las crisis se sale paso a paso. Todo toma su tiempo y las cosas no llegan antes de lo que deben. Sólo se puede cruzar cada puente cuando se llega a él.
Es bueno hablar la tristeza en los inviernos del alma, sacar el dolor alivia el odio hacia el destino trágico y la presión interior. Hablar el dolor permite que lo lleno se vacíe para albergar nuevos sentimientos. La interacción en tiempos de crisis no es una pérdida de tiempo, todo suma a lo que somos. Muchas veces no basta con lo que somos o tenemos, debemos permitir que otros nos ayuden a conpletarnos.
Y dentro de las situaciones duras, el amor puede no llegar con fuegos artificiales, puede llegar sin ruido, suavemente... Me quedo con la impresión de la fuerza multiplicadora y llena de vida del amor real, que todo lo soporta y todo lo cubre.
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Texto: Edith Gero
Imagen: www.bancodeimagenesgratis.com
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